Los internos del neuropsiquiatrico José Borda preguntan a sus invitados qué sintieron cuando atravesaron los muros. ¿Sintieron miedo?, preguntan. ¿Sintieron vergüenza?
Los invitados preguntan, sin abrir la boca, qué se siente ser “loco”. ¿Sienten miedo?, preguntan. ¿Sienten vergüenza?
Éstos, los internos del mundo, y aquellos, también internos del mundo, se abrazan con los brazos. Se preguntan y se conversan, se sueñan en el día y se despiertan por la noche. Sueñan y despiertan sabiéndose internos del mundo.
Pero los que evitan, los «evitandos», no sueñan ni abrazan. Viven evitando, y evitando mueren. Éstos son los externos del mundo, que viven evitando vivir con abrazos. Y cuando aparece uno inevitable, cuentan, tres, dos, uno, listo.
A éstos, uno, no le pregunta sí sienten miedo, ¿Sienten?
Horacio
1 comentario:
Muchas gracias Horacio por subirte al colectivo, cualquier cosa que quieras publicar va a ser bienvenido. Espero podamos conocernos mejor personal o virtualmente. Mauro
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